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El día 2 de mayo se celebra el Día Internacional contra el Bullying o el Acoso Escolar. El objetivo es concienciar acerca del riesgo de acoso escolar que encontramos mayoritariamente en los niños y jóvenes a nivel mundial, así como encontrar mecanismos para evitar esta situación.

El 2 de mayo fue establecido tanto por asociaciones no gubernamentales como de padres, con la finalidad de sensibilizar acerca de los riesgos del acoso escolar y para establecer un protocolo de actuación ante los casos de acoso escolar. Esta fecha señalada se representa con un lazo de color morado.

¿Qué entendemos por bullying o acoso escolar y cuáles son sus consecuencias?

El bullying es la forma de comportarse de manera física o verbal hacia otra persona, caracterizada por amenazas hostiles, ejerciendo cierto poder sobre otra persona. Estas amenazas son reiterativas provocando un desequilibrio entre la víctima y el acosador. La persona sufre intimidación, amenazas, manipulación, agresiones…

A pesar de que siempre ha existido este problema en la sociedad entre la población más joven, en los últimos años el problema se ha agravado, teniendo importantes consecuencias en la vida de los infantes las cuales les pueden marcar hasta en la edad adulta, tanto a ellos como a su entorno más cercano.

El bullying se asocia con problemas afectivos y conductuales entre los que se destacan: un déficit de habilidades sociales, el rechazo por el grupo de iguales, baja autoestima, fracaso académico, depresión y ansiedad o autolesiones, siendo necesaria la atención psicológica en un gran número de casos. Actualmente, se observa como la tasa de suicidio ha crecido exponencialmente sobre todo entre los más jóvenes.

Cuando un niño es víctima de acoso, erróneamente se cree que dicha situación le va a hacer más fuerte y va a poder afrontar circunstancias difíciles en la vida adulta. En contraposición, estos niños cuando crecen, en la mayoría de casos son personas inseguras, carentes de habilidades para relacionarse con otras personas de manera sana. Para estos niños el maltrato es una forma natural de relacionarse y repetirán patrones en los que en muchos casos atraigan a personas maltratadoras, manteniéndose un círculo vicioso.

Nosotros como parte de la sociedad, no podemos quedarnos indiferentes antes esta problemática ya que afecta a un gran número de jóvenes. Es necesario crear conciencia en diferentes contextos como en los hogares y en los colegios.

Paula Palacián

Psicóloga

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